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Turrulitas de maíz

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 Turrulitas de maíz  ( pastelitos, buñuelos, biñuelos y torrejitas) Las turrulitas  Uno de los sabores   más memorables de mi infancia son las “turrulitas", unas frituras de maíz recién cosechado, conocido como “maíz nuevo” en nuestra región. Recuerdo ayudar a mi madre y mis tías en la cosecha y pelado de este maíz fresco, reservando las hojas para hacer bollos y una gran parte para tamales. Mi abuelo solía colgar parte de la cosecha para secar, pero lo más delicioso eran las "Turrulitas", elaboradas a partir de ese maíz dulce y carnoso de aquella época. Como niños, solíamos divertirnos explotando los granos y salpicándonos mutuamente. Mi abuela insistía en cortar solo la mitad del grano y raspar la pulpa adherida a la "Tusa", como llamamos al centro del maíz en nuestro pueblo. Ella daba las instrucciones con autoridad, mientras mis tías, lideradas por mi madre o mi tía Pile, se encargaban del proceso junto a ella. Las frituras se elaboraban moliendo el maíz fr

Una vida en el fogón

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Una vida en el fogón  "Mi historia comienza en David Chiriquí, un lugar donde la memoria se entrelaza con las montañas y los ríos. Recuerdo mis primeros años en Nueva Suiza, un pintoresco pueblo anidado entre Cerro Punta y el volcán. Allí, la familia Jurado llenaba el paisaje, con mi abuela, abuelo, madre, primas y hermanas, junto a cinco traviesos niños que correteábamos sin cesar. Crecí entre fogones, con mi abuela enseñándome los secretos del café en olla y los sabores de las carnes cocidas a fuego lento. Mientras tanto, mi abuelo cultivaba frijoles, fresas, chayotes y más, mientras mantenía a nuestras mascotas: vacas, gallinas, gansos y perros siempre vigilantes. Ese fue mi mundo, impregnado del aroma a tortilla y el sabor del café, donde aprendí desde pequeño a apreciar las delicias de la vida en las tierras altas chiricanas." El balde  rojo  Como niño en este entorno, tenía mis responsabilidades además de la escuela. Mis tareas incluían alimentar a los pollos y gallinas